Y es que, por ejemplo, rechazará el financiamiento a las personas que quieran comprar casas donde no existan servicios como escuelas, transporte o espacios públicos; o que estén a más de 2 kilómetros de planteles escolares, centros de abasto y espacios recreativos. La movilidad se restringirá a que no sean más de 30 minutos caminando, 20 minutos en bicicleta y 45 minutos en transporte público.
Así, las nuevas reglas incluyen lineamientos técnicos que se centran en tres factores: ubicación, entorno de la vivienda y suelo destinado. De igual forma están los relativos a la movilidad adecuada, la acción colectiva en mantenimiento y operación en desarrollos habitacionales de traza urbana cerrada. Esto podría restringir la actividad de la construcción e impactar la demanda de materiales de la construcción y productos ferreteros. No obstante, sabemos de varios desarrollos de vivienda que, a la postre, fueron abandonados por carecer de las características que ahora exigirá el Infonavit.