La reducción se dará con el aumento de la tasa de coprocesamiento de residuos hasta el 32% proyectado al año 2030, y la reducción del contenido promedio de Clinker (producto que se muele para fabricar cemento a un 66%).
La Hoja de Ruta está alineada con el Acuerdo de París –tratado internacional sobre el cambio climático adoptado por 195 países en diciembre de 2015–, cuyo objetivo es limitar el calentamiento global a menos de dos grados Celsius por encima de niveles preindustriales.
El trabajo “verde” de las fabricantes de cemento y concreto es relevante por su importancia y participación en los insumos que se utilizan en la industria de la construcción. En México operan 35 plantas y nuestro país se ubica entre los 20 principales productores de cemento en el mundo y el segundo en América Latina.