Normalmente, los paneles solares están hechos de silicio refinado capaz de convertir la luz solar en energía limpia, aunque el proceso de refinar silicio no es nada limpio pues requiere mucha energía de centrales eléctricas emisoras de carbono. Para una alternativa más limpia al silicio, los investigadores se enfocaron en delgadas capas de perovskita de bajo costo y flexibles paneles solares producidos con poca energía y ‘virtualmente’ sin emisiones de CO2.
Según un estudio, publicado en la revista Joule por Nick Rolston, académico de la Universidad de Standford, se demostró una manera “ultrarrápida” de producir paneles estables de perovskita y ensamblarlos en módulos solares capaces de administrar energía a aparatos electrónicos, edificios e incluso toda una red eléctrica.
Dichos paneles solares de perovskita son unas delgadas películas de cristal sintético hechas de abundantes químicos baratos, como yodo, carbón y plomo. Son de peso ligero, flexibles y pueden desarrollarse en laboratorios al aire libre a temperaturas cercanas al punto de ebullición del agua, muy lejos de los mil 650 grados Celsius de los hornos para refinar el silicio industrial. Con este trabajo se consolida un nuevo hito para la fabricación de paneles de perovskita, al tiempo que resuelve la mayoría de las más grandes barreras para la fabricación a escala de módulos con las que la comunidad ha estado lidiando por años.
Los científicos descubrieron que los paneles de perovskita convierten el 25% de la luz solar en energía, un resultado más eficiente a comparación de los paneles de silicio. Estos nuevos paneles, según la Universidad de Standford, pueden ser producidos por cerca de 25 centavos de dólar por pie cuadrado, mucho más barato a comparación de los 2.5 dólares por pie cuadrado de los paneles hechos con silicio. Estoy ayudará considerablemente a las energías limpias a cuidar mejor del medio ambiente y las finanzas.