La decisión, además de movilizar pasajeros, permitirá agilizar y reducir los costos del transporte de mercancías como el cemento. De acuerdo con fabricantes de la industria cementera, el traslado de sus productos por ferrocarril es entre 30 y 40% más barato que otras opciones (carretera), y aunque actualmente mueven entre un 20% y 30% por vías ferroviarias, la apertura de nuevas rutas podría duplicar este porcentaje y abatir sus gastos, impactando positivamente el costo para el consumidor final.
De hecho, en los primeros meses de 2023 la industria cementera demandó mayor apertura de vías ferroviarias para hacer más eficiente su cadena de distribución, abaratar sus costos logísticos y reducir la emisión de contaminantes. No obstante, cabe anotar que no todas las plantas de cemento cuentan con la infraestructura necesaria para trasportar su producto por tren. En la actualidad, del total de cemento que se produce únicamente alrededor de 15% se traslada por vías férreas.