La mayoría de sus obras están en Japón, y algunas otras en Suiza y China, y van desde una estación de bomberos a conjuntos de usos mixto y universidades a conjuntos habitacionales.
Yamamoto, conocido por su trabajo que combina arquitectura con problemáticas sociales, tiene como objetivo crear sociedades armónicas a pesar de la diversidad de las identidades, las economías, las políticas, las infraestructuras y las viviendas. El sentido de su trabajo dice, es crear una arquitectura que pueda aportar felicidad a la gente.
“Transparencia” es la palabra con la que el jurado del Premio Pritzker 2024 califica el trabajo de Yamamoto, porque en su diseño busca la manera de que el entorno se comunique con el interior de los espacios, eliminando el límite entre lo público y privado, incorporando cristales en fachadas, áreas libres en la base de las construcciones y patios centrales para fomentar la comunidad entre los habitantes.
Con un profundo arraigo en la defensa de la vida comunitaria, afirma que el valor de la privacidad se ha convertido en una sensibilidad urbana, cuando en realidad los miembros de una comunidad deberían sostenerse unos a otros.
Uno de sus trabajos es “Viviendas Pangyo”, realizado en 2010 en Seongnam, República de Corea. El desarrollo se compone de nueve bloques de nueve a 13 unidades con poca altura, transparentes en la planta baja para que haya conexión entre los vecinos.