Ante todo, debemos asumir que la incertidumbre seguirá permeando en la toma de decisiones de quienes participamos en la economía, desde el sector productivo hasta el comercio minorista.

México todavía está inmerso en un proceso global que busca bajar los elevados niveles de inflación, teniendo como herramienta fundamental el incremento de las tasas de interés para lograrlo, aunque con ello se ha encarecido el crédito y minado las ventas minoristas. Este proceso ya se reflejó en los datos de las ventas de la ANTAD desde el pasado mes de noviembre –aún con El Buen Fin–, mismos que anuncian un menor dinamismo de la economía durante 2023. A este escenario se suma la desaceleración esperada de la economía estadounidense y, por tanto, de las exportaciones mexicanas.

Por otra parte, analistas de Barclays México anticipan un avance significativo en la transición hacia una economía sustentable y el crecimiento de la relocalización de la proveeduría en el mundo (nearshoring) para impulsar la resiliencia de las cadenas de suministro, en especial en México gracias al T-MEC, y que podría significar para el país un cambio estructural similar al que trajo la negociación del TLCAN de 1994. Aunque, señalan los especialistas, surgen dudas respecto a si el país podrá aprovechar la oportunidad, pues al día de hoy enfrenta problemas de suministro eléctrico, baja inversión en infraestructura, así como un débil Estado de derecho y seguridad.

De acuerdo con los pronósticos, en 2023 se espera que la economía registre un crecimiento inferior al 1% (para 2022 la estimación se estableció entre 2.5 y 3%); la inflación cierre en torno al 5.2%, y la tasa de interés de referencia se mantenga elevada (alrededor de 10%). Para el tipo de cambio su previsión es que se mantenga estable, dentro de un rango de 20 y 21 pesos por dólar.

Las expectativas en el 2023 no son las más optimistas, pero podría ser este el año de la transición para retomar el crecimiento de la economía y del mercado interno sobre bases más sólidas.

Mundo Ferretero te desea felices fiestas.

Eduardo Casanova Islas

Presidente del Consejo Editorial